El Seguro de Jubilación es un producto destinado a complementar la pensión pública a través de un sistema de previsión o aportaciones facilitado desde la empresa.
Llegado el momento, el empleado podrá elegir cómo recibir el capital que haya acumulado con su seguro:
- Como una renta vitalicia.
- Percibiendo todo el capital
- De forma mixta: una parte en capital y otra parte en renta vitalicia.
Límites y exenciones fiscales
Este beneficio se considera salario en especie y está exento de impuestos. Cuando la empresa ofrece el producto a sus empleados (ya sea como Beneficio Social o como Retribución Flexible), tiene que decidir si imputar las primas a los empleados o no.
- Si se imputan, no se tendrá exención fiscal. En el momento de la jubilación, el empleado pagará impuestos sobre la diferencia entre las aportaciones y lo que recibió (la plusvalía). La empresa puede deducir las aportaciones del Impuesto de Sociedades. Sin embargo, la compensación para el empleado es tan negativa que es muy poco común que una empresa lo haga.
- Si no imputan, se considerarán que todavía no son propiedad del empleado. Cuando se recibe la prestación, se tributa por el total.Esa cantidad se agregará a la cantidad que el empleado debe pagar de impuestos por sus ingresos laborales. Cuando el empleado reciba la prestación, la empresa podrá deducir el importe total en el Impuesto de Sociedades. Esta opción es la más común y se utiliza en los planes de retribución flexible.
Cómo activar el beneficio
Si es la primera vez que quieres activar este beneficio, debes de ponerte en contacto con tu account manager para que puedas ver los diferentes Seguros de Jubilación que tenemos y decidas cuál quieres contratar.
Una vez ya esté contratado, para activar el beneficio, simplemente, haz clic en el botón “Activar beneficio”.
Una vez que lo actives, el personal que tengas asignado a ese grupo de empleados podrá hacer uso del Beneficio de Seguro de Jubilación y empezar a hacer solicitudes.